Posiblemente te ha pasado alguna vez. Nos referimos al hecho que irás conduciendo con carretera recta, bien pavimentada la misma tiene poca circulación. Cuando de repente parecerás despertar como de un trance y se te hará imposible el recordar que ha podido pasar por últimos segundos.
Pues, si te ha pasado déjame decirte que has sido parte de “Hipnosis de la carretera”
El principal informe sobre tal fenómeno se ha remontado para 1921. Pero, esto no volvería a estudiarse en profundidad hasta 1940.
En la actualidad se le ha conceptuado como estados mental por el cual caemos como una consecuencia de que patrones de estímulos y movimientos por conducción ha sido absolutamente predecible.
Esto se ha comparado en conducir por un extraño “Piloto Automático”
Esto no sólo ocurre por automóviles; si no para cualquier vehículo motor.
También se ha conocido como la “Hipnosis de autopista” o la “Fiebre de línea blanca”
Mientras circunstancias las cuales aumentan posibilidades de caer en hipnosis se encuentra el cansancio el cual altera manera como información pudiese llegar en manera consiente por nuestro cerebro.
Científicos han afirmado que cuando sufrimos tal hipnosis las actividades cerebrales sería más lenta y a su vez disminuye frecuencia con la cual diferentes partes en el cerebro se han de comunicar entre sí.
Otros motivos los cuales facilitan hipnosis de carretera sería el hacer recorridos habituales por los que no habría que prestar atención en señales de tráfico circular en vías rectas por las que sin querer fijaremos vista en puntos lejanos.