Cuando pensamos en países o naciones nos viene a la mente un territorio (por demás extenso), con (al menos) miles de habitantes, un gobierno constituido, leyes, fronteras y demás.
Pero, resulta que existen además unas naciones que, al menos en lo referido al territorio y la población, no guardan ninguna relación con las naciones tradicionalmente constituidas. Es el caso de las micronaciones.
¿Qué son las micronaciones?
Las micronaciones son entidades independientes, apenas proyectos de países, que aun cuando proclaman ser estados naciones constituidos no tienen el reconocimiento de las instancias internacionales.
Las micronaciones están conformadas por pequeños grupos de personas. En algunos casos estás personas pertenecen a algún culto o secta que los unifica bajo un mismo credo.
Muchas micronaciones sólo existen en el imaginario de sus defensores. En algunos casos en el papel. Aunque en los últimos años, la mayoría de estas llamadas micronaciones existen sólo en internet.
El caso más conocido de micronación, es el de Sealand.
Sealand, la micronación más conocida
El Principado de Sealand es una micronación gobernada por una monarquía hereditaria.
Fue creada el 2 de septiembre de 1967 por Paddy Roy Bates.
Los detalles de la creación de este micro principado no dejan de ser curiosos. Paddy Roy Bate, un ciudadano británico ocupó una plataforma construida por el Reino Unido durante la segunda guerra mundial. La plataforma conocida como HM Fort Roughs, ubicada diez kilómetros del litoral de Suffolk (Inglaterra) se convirtió en el espacio territorial de Sealand el cual tiene una superficie habitable de 550 metros cuadrados.