La natación es un deporte un poco desconocido, pero que lo puede practicar cualquier persona a cualquier edad con riesgos muy bajos de lesión. En otras actividades de fitness, como correr, el impacto sobre las articulaciones es mayor y con el tiempo acaba desembocando en problemas y lesiones. En la natación, en cambio, el impacto sobre las articulaciones es mínimo, de forma que se pueden aprovechar al máximo los beneficios del ejercicio físico. Por esta razón, la natación es un deporte muy completo recomendado para personas con problemas de peso, de edad avanzada o con problemas en las articulaciones (rodillas y tobillos).
Entre los beneficios que nos aporta la natación encontramos el aumento de la resistencia cardiopulmonar, la estimulación de la circulación y la reducción del riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares, debido a que es un deporte en el cual se trabaja mucho la capacidad pulmonar y la de la sangre para transportar oxígeno hacia el corazón. Por otro lado, nadando es uno de los deportes en los que más grupos musculares se entrenan, de modo que el tiempo invertido tiene un gran rendimiento. Por último, destacamos que ayuda a desarrollar la flexibilidad y a tener una postura correcta, entre muchos otros beneficios de esta actividad física.
Además de los beneficios de la natación sobre nuestro cuerpo, también hay que tener cuenta los beneficios del ejercicio físico sobre nuestro estado de ánimo. En el agua nuestra libertad de movimientos es mucho mayor, aunque tengamos los huesos doloridos o suframos obesidad, de modo que estaremos mucho más cómodosy nos sentiremos más libres que fuera del agua.
Por otro lado, el agua siempre se ha relacionado con la relajación y la diversión. Nos imaginamos descansando en una playa o jugando en una piscina… y por esta razón oír el agua nos transmite un sentimiento de bienestar, lo cual es esencial para evitar el estrés.
A pesar de los beneficios del ejercicio físico que nos aporta, hay que recordar que todos los deportes tienen un cierto riesgo si no se practican adecuadamente. Si quieres empezar a practicar la natación, debes leer las siguientes recomendaciones:
- No comas nada antes de entrar en el agua, podrían darte calambres o incluso un corte de digestión.
- Hidrátate adecuadamente, el hecho de estar en el agua puede hacernos pensar que no tenemos sed, pero se pierde agua como en cualquier otro ejercicio. Bebe 1 litro de agua por hora de ejercicio aproximadamente.
- No te exijas demasiado. Poco a poco podrás entrenar más duramente, pero si empiezas demasiado fuerte puedes tener problemas.
Verás como siguiendo estos consejos pronto empezarás a notar los beneficios del ejercicio físico que nos aporta la natación.