Los efectos de la lluvia ácida no solo producen consecuencias sobre el cambio climático, como señalan los investigadores científicos, todos conocemos las consecuencias de la lluvia acida sobre el medio ambiente, deteriorando los ecosistemas y perjudicando la vida vegetal y animal.
Sin embargo, existe un aspecto bastante olvidado, el deterioro de las estatuas, edificios históricos, bustos y columnatas reconocidas a nivel mundial, con el pasar del tiempo la lluvia ácida ha venido haciendo estragos sobre las mismas, dañando poco a poco la belleza por las que son conocidas.
La lluvia acida es provocada por las emisiones de dióxido de carbono que cambia la química de la atmosfera, provocando que el agua que se precipita venga cargada de ácido carbónico, esa precipitación es mucho más acida que el vinagre y en la actualidad está produciendo efectos corrosivos sobre esculturas, iglesias y estatuas.
La lluvia acida afecta principalmente a las esculturas realizadas con cobre, piedra calcárea, pero sobretodo el mármol, razón por la cual, ya se ven estatuas afectadas por este fenómeno climático.
Estatuas afectadas en la actualidad por la lluvia ácida
En el mundo son muchas las esculturas y edificios elaborados con cobre, piedra calcárea y mármol, expuestos por supuesto a los efectos catastróficos de la lluvia acida. Unas de estas estructuras que están sufriendo deterioro son la Catedral de Milán, la Catedral Santa María dei Fiore en Florencia, el Palacio Ducal de Venecia, las esculturas de Bernini que se encuentran en la Fuente de los Cuatro Ríos en la Plaza Navona de Roma.
También se han visto afectadas por la lluvia acida la Fontana di Trevi, el Taj Majal, que ha sufrido cambios en su coloración, no solo por causa de la lluvia acida, sino también por la polución ambiental y hasta la escultura más famosa a nivel mundial la Estatua de la Libertad en New York, la cual presenta en la actualidad problemas graves en la piel, causándole un aspecto verdoso sobre ella.
Es posible que en aproximadamente 20 años estos edificios, estatuas y esculturas se vean afectadas enormemente por los efectos de la lluvia ácida, siendo una de las soluciones más rápidas el cubrimiento de las mismas, pero afectarían el atractivo turístico de muchos lugares reconocidos a nivel mundial.
Por lo tanto, la mejor solución es disminuir considerablemente las emisiones de dióxido de carbono provocadas por la quema de combustibles fósiles.